David Matarranz/CARRASCAL DEL RIO
Un año más se cumplió la tradición y San Frutos fue honrado por cientos de devotos en su romería celebrada en su ermita en el paraje natural de las Hoces del Duratón. Bajo el vuelo de los buitres leonados que dominan el cielo, se celebró la misa de campaña y la procesión con la imagen del santo llevado en andas, bajo un cielo despejado y una temperatura más que agradable.La jotas y bailes no cesaron en ningún momento, y tras la procesión la imagen retornó al templo tras celebrarse la subasta de andas.
La tradición se cumplió, y los romeros dieron tres vueltas a la piedra instalada bajo el altar, para cuidarse de hernias y quebraduras; así como fueron muchos los que recogieron el perejil en las praderas cercanas al templo románico, que data del Siglo XI y de antecedentes visigodos. Los más habituales de la romería indicaban la menor presencia de público, dado que la fiesta cayó este año en día entre semana, pero que se suele recuperar cuando cae en fin de semana. Una de las novedades de este año es la restauración de la imagen instalada en el altar del interior de la Ermita, cuyos gastos han sido sufragados por el Patronato del Alcázar de Segovia.
Tras los actos religiosos, los asistentes disfrutaron de los distintos puestos de comida y bebidas, así como de venta de frutos secos. encurtidos o juguetes. Las mesas con meriendas y bocadillos hicieron acto de presencia para cerrar una jornada de fiesta con el patrón de Segovia, San Frutos.
